Llevo pensando en esta frase de la canción de Antonio Machín desde hace días. Tenía ganas de escribir sobre el aspecto psicológico de las que pasamos por este proceso. A menos que tu mentalidad sea súper hippy, tanto si te quedas embarazada de forma natural como si lo haces por reproducción asistida, hay que pasar el periodo de riesgo. Esos tres primeros meses horrorosos en los que cualquier cosa puede hacer que todas tus ilusiones se vayan al garete y entres en esa fase de tristeza por pensar mil cosas…y ninguna buena.
En el caso en que, o por cuestiones técnicas como la mía (no haya un «padre» y necesite esperma de un donante) o por meras cuestiones humanas (dicese de «algún problema en el proceso natural de fecundación en una pareja»), cuando llega el momento de tomar la decisión de acudir a un centro de reproducción, ya llevas tu «mochila» encima, con cantidad de dudas, de miedos, de indecisiones. En mi caso personal era el afrontar esto sola, sin pareja (para mí la figura de mi padre es esencial, es uno de mis pilares, y que mi hijo o hija carezca de esto me ha estado partiendo el alma durante años). Pero conozco a muchas parejas que ya llevan tiempo intentándolo, y visto que les es imposible, acuden llenos de temores para intentarlo por la otra vía…la complicada.
Lo peor de estas cosas siempre recae en nosotras, las mujeres…el tratamiento hormonal suele provocar que nos convirtamos en una montaña rusa emocional. Yo primero quería a todo el mundo, llenaba mi muro de facebook con fotos y artículos de inteligencia emocional, y luego los mezclaba con mensajes de odio hacia los hombres, hacia los que comían carne, y mis arrancadas de mal humor me sorprendían hasta a mí..vamos….una verdadera reencarnación de Juana la Loca.
Luego nos dan la buena noticia…el test sale positivo…¡¡y subidón!! ¿o no? En ese momento sí que se le podría hacer honor al título del blog, un mundo de sensaciones…encontradas…¿lo digo? ¿no lo digo? ¿irá bien? ¿me espero a que se pase el posible riesgo para luego no tener que decir con cara larga que algo ha salido mal?
A partir de ese momento y como seas una paranoica como yo, el que probablemente sea el mejor momento de tu vida puede convertirse en una tortura como tengas unos síntomas que ninguna amiga tuya tenga, o al contrario, que no tengas tú los mismos que ellas y te de por pensar que algo pueda ir mal. Y es que hasta las 12 semanas…¡¡no te ve el dichoso ginecólogo para hacerte la ecografía!! ¿Cómo podeis soportarlo?
Yo a las tres semanas del positivo manché muchísimo…mi hermana me dijo tan ricamente que estaba abortando, que me tranquilizara, mientras yo sufría un ataque brutal de ansiedad, viendo la escabechina que se estaba produciendo en mi cuerpo. Supongo que no perder la calma sería lo ideal en estos casos, pero a ver quien es la guapa que lo puede conseguir, porque con la sangre, con los dolores, se van también ilusiones, esfuerzo, ahorros…
Al final me dijeron que llevaba dos embriones, y perdí uno. Y que tenía que hacer reposo absoluto y controlarme la TSH (glandula tiroidea) si quería salvar al otro. Han sido unas semanas de paranoia, de ir de la cama al sofá y del sofá a la cama, de sentir la pérdida de mi hijo por un lado, y de sentirme aliviada porque con dos creo que me hubiera dado algo, y luego sentirme mal por sentirme aliviada, en fín, un maldito caos. Al final este blog ha sido algo terapéutico para mí, para cubrir los muchos momentos ociosos que se pasan cuando no puedes hacer mucho más que estar pendiente del móvil o del ordenador, o de las sensaciones de tu cuerpo cambiante (en mi caso son dolores, muchos, en el bajo vientre, cuando estornudo o toso, o me giro en la cama, cuando en el coche pillo una banda sonora de esas horribles…)
El viernes pasado, que ya cumplí las 10 semanas, mi ginecóloga me dijo que ya estaba bien, que mi embrioncete medía ya casi 3 centímetros, y a falta de conocer mis valores del tiroides ya puedo hacer vida normal sin excesos. Fue un verdadero alivio, la verdad. Y mirad como se ve mi bicho loco, que no hacía más que moverse:
Así que he decidido que tengo que tomarme las cosas de otro modo. Aprovecho para preguntar a todo el mundo cómo ha ido todo, cómo lo ha llevado, los interrogo a fondo para saber un poco más de este proceso tan distinto a todo lo que he vivido anteriormente, y sobre todo, me sumerjo en toda la positividad que me es posible, porque he tardado mucho en llegar hasta aquí, y creo que me lo merezco, me merezco vivir mi sueño, como se lo merecen todas las mujeres que quieren ser madres y vivir esta experiencia plenamente, con sus dudas, sus alegrías y sus esperanzas.
Así que si alguna está en mi misma situación, o ha pasado por algo similar a mi caso, y encima se da la maravillosa casualidad de que está leyendo este post, sería una pasada que me contara su experiencia, o cómo lo llevó, o cuales fueron sus peores miedos y qué pasos dió para lograr vencerlos.
Si descubro alguna panacea para sobrellevar esto de mejor forma, sereis los primeros en saberlo. Prometido 😉
Me alegro de que al final haya salido bien y hayas podido ver al bichillo en la eco 🙂 es increíble como se mueve verdad? Verás cuando lo empieces a notar!
Yo también notaba muchos pinchazos que me preocupaban pero el gine siempre me dijo que eran producidos por el estiramientos musculares del útero y que es totalmente normal…
El jueves entro en el tercer trimestre y la verdad es que siempre tengo alguna preocupación encima… hoy no le he notado mucho, irá bien? Hoy he tenido alguna molestia en el bajo vientre, será malo? Y así con cualquier cosa… pero bueno, pacieeeencia y a disfrutar el embarazo!
Un besote!
Siiii, la verdad es que después de que me dijeran que ya puedo ir haciendo vida normal y que ya sólo me quedan apenas dos semanas para superar el periodo de riesgo reglamentario, me lo voy a tomar con mucha más tranquilidad. También a mí me dijeron que los dolores eran normales, y podían ser los gases, o bien los músculos, o que la matriz recibe 6 veces más sangre que habitualmente. Ahora intento asumirlo como normal. Y por ahora estoy más tranquila y felíz, pero…ufff…lo que me ha costado!! Madre mía…¡¡tercer trimestre ya!! ¡¡No te queda nada!! ¡¡Qué ilusión!! Pues eso, a disfrutar, que me han dicho que durante esta etapa las hormonas te tienen como una moto jajajajaja. Un abrazo grande!!
Hola!!! Encontré tu blog y no he parado de leer, te cuento que estuve desde la semana 7 en reposo absoluto y hoy ya estoy en la semana 13 y ya no tengo molestias tenía un hematoma que me generó la amenaza de aborto y se ha disminuido mucho. Miedos…. Preguntas por miedos pues yo he pasado por todos, desde si seré buena madre, si me reprochará por no darle un padre, si seré sobre protectora, el tema financiero para miedos aparecen todos y como dices es una batalla de emociones que aveces me ponen a dudar pero veo las ecografias y ohhh que alegría por la amenaza me hacen cada 8 días así que he podido ver su evolución y hoy lo vi inmenso. Esto es maravilloso, te cuento que cuando no tenía intenciones de tener hijos veía a mis amigas en esta etapa y más de una vez puse en duda que uno se sintiera tan feliz y es ciertooooo desde el primer momento me siento inundada de amor por mi gótica. Espero que todo siga igual de feliz y saludable. Miles de bendiciones. Me encanto esta nota.
Muchísimas gracias preciosa!! Me alegro muchísimo que todo vaya bien a pesar de esas pequeñas complicaciones y miedos…ojalá nuestra esperanza por que todo salga bien haga que nuestros bebés nazcan sanos y felices. Un abrazo!!
Es difícil encontrar a escritores con conocimientos sobre este tema , pero creo que sabes de lo que estás comentando. Gracias compartir un articulo como este.
¡Gracias!